MÉTODOS DE CUANTIFICACIÓN DE LA CARGA

Algunos conceptos de la cuantificación de la carga de entrenamiento en deportes de resistencia cícilica.

Existen algunos sistemas y propuestas de cuantificación de cargas de entrenamiento (TL) en deportes de resistencia cíclica; los métodos en función de la percepción subjetiva del esfuerzo (RPE), los métodos basados en variables fisiológicas y las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías.

Conociendo que, el objetivo final del entrenamiento deportivo es promover un mayor rendimiento, es necesario llevar una correcta progresión, distribución y optimización de las cargas de entrenamiento (Mujica, 1998, Mujica & Padilla, 2003), la medición de la carga de entrenamiento es un elemento clave para valorar y comparar diferentes sistemas de entrenamiento y por consiguiente, medir las adaptaciones que éstos provocan.

Cuantificación en función de la carga percibida. La utilización de la Percepción del Esfuerzo (RPE), propone una escala de percepción (Escala de Borg, 1975) en la cual el deportista determina la intensidad del esfuerzo (escala de 6 a 20 o de 0 a 10). La utilidad de esta cuantificación subjetiva, fué validada relacionando este método con variables fisiológicas objetivas (Seiler & Kjerland, 2006; entre otros).

Foster, (2001) sugirió la asignación de una puntuación de la intensidad a la sesión (De 0 a 10), en función de la percepción del atleta y multiplicando este valor por el tiempo de duración de la sesión. Una de las últimas investigaciones al respecto, presenta una escala de puntuación con valores de 0 a 5 (Cejuela & Esteve-Lanao, 2011), denominado Equivalente de Carga Subjetiva (ECS); éste método propone la medición de valores diarios y acumulados, a comparar con la evolución de la carga objetiva y la carga subjetiva.

Impulso de entrenamiento (TRIMP). Este modelo, cuantifica el estímulo de entrenamiento como una composición de carga externa y carga interna, multiplicando la TL (volumen) por la intensidad del entrenamiento (Taha & Scott, 2003).

Bannister, (1980) propuso por primera vez este método, donde considera factores diferentes para hombre y mujer; Morton (1990) sugirió una modificación con el objetivo de poder cuantificar de una mejor manera las intensidades altas; el sistema TRIMPi (Manzi, 2009), donde se propone evitar la desproporción entre los diferentes tipos de entrenamiento con la incorporación de un factor (y). Por su parte, Hayes y Quinn (2009), presentan un modelo que permite realizar comparaciones de entrenamiento continuo e interválico, considerando las pausas y el tipo de recuperación; Lucía (1999) propone simplificar el modelo original de Bannister basándose en el modelo trifásico de Skinner y McLellan (1980) reduciendo a 3 las zonas de entrenamiento.

Recientemente se ha publicado el método de Impulsos de Entrenamiento Acumulado (TRIMPc), aplicado a nadadores (García-Ramos et al. 2015), que presenta una modificación importante al permitir tener en cuenta el tiempo de ejercicio y el de pausa o recuperación, corrigiendo la tendencia del sistema Bannister a subestimar la TL debido a que no discrimina entre el ejercicio y la pausa durante un entrenamiento.

Exceso de Consumo de Oxígeno Post- Ejercicio (EPOC). La medición del EPOC ha sido sugerida como reflejo de la respuesta del organismo a una sesión de entrenamiento (Jobson, Passfield, Atkinson, BArton, & Scarf, 2009), necesita ser medido en el laboratorio, lo que conlleva un gasto importante. Rusko et al. (2003) propone un modelo matemático capaz de estimar el EPOC en función de la FC, realizando un cálculo relativamente complejo requiere de un software y hardware específico.

Variabilidad de la Frecuencia Cardíaca. El uso de la variabilidad de la FC (VFC) post-ejercicio ha tomado mayor protagonismo ante la comunidad científica como un método válido para cuantificar la TL. Saboul, Balducci, Millet, Pialoux y Hautier (2015) propusieron una nueva forma de cuantificar el rendimiento llamada Indice de Variabilidad de la Frecuencia Cardíaca, teniendo en cuenta tanto los entrenamientos continuos como interválicos, aunque las necesidades del entorno, condiciones específicas, hidratación y un sistema de monitorización, en ocasiones puede resultar dificultoso.

Producción de Potencia (W). Los sistemas que permiten una medición continua de la potencia

generada (SRM y Power Tap) y su utilización por parte de ciclistas de élite, ha incrementado el interés por este tipo de mediciones. La asociación de una determinada intensidad (W) a unas respuestas fisiológicas, permiten el análisis tanto del entrenamiento como de la competencia (Jobson et al. 2009; Gardner, Stephens, Martin, Lawton, Lee & Jenkins, 2004) sin depender de la variabilidad de la FC.

Zonas de entrenamiento. La utilización de escalas de entrenamiento en función de la FC ha sido ampliamente propuesta por diversos autores.

Edwards (1993) propone 5 zonas en función de la FC máx, asignando una puntuación de 1 a 5 (zona 1: 50-60%, zona 2: 60-70%, zona 3: 70-80%, zona 4: 80-90% y zona 5: 90-100%). PAra obtener la cuantifcación de la carga, Edwards propone la multiplicación del tiempo (min.) pasado en cada zona por la puntuación de esta misma. Existen más propuestas como la de Mujika et al. (1996), donde para obtener el cálculo de la TL, es necesario multiplicar el volumen (km) en cada zona de intensidad por su coeficiente, sumando todas las puntuaciones para conseguir la carga total; el modelo ECOs permite la cuantificación del Triatlón (Cejuela y Esteve-Lanao, 2011), de manera general propone la asignación de unos valores en función de la zona de entenamiento dependiendo de la intensidad, multiplicar por el tiempo (min) y a su vez por el factor 0.75, 0.5 y 1 considerando si es natación, ciclismo o carrera.

Futuras aplicaciones prácticas. En la actualidad es posible encontrar en el mercado productos accesibles para la medición continua de la VFC y la Potencia o Velocidad generada en situaciones de entrenamiento o de competencia reales, que hasta hace algunos años, solo podían ser medidas en el laboratorio. Por ello, el uso de estas nuevas tecnologías posibilita la creación de nuevas propuestas para cuantificación de la TL.

CONSULTA EL ARTÍCULO ORIGINAL:

Muñoz Pérez I. (2016). Métodos de cuantificación de la carga de entrenamiento en deportes de resistencia cíclica. Búsqueda, 3(16), 53-63. https://doi.org/10.21892/01239813.166